¿Llevas tiempo pensando en decirle chao al jefe? ¿Tienes una idea, pero dudas a la hora de emprender?
En Fivana somos expertos en pymes, micropymes y en negocios que están partiendo. Si ya te decidiste a emprender, te dejamos unas recomendaciones para hacerlo bien y que en el futuro te digan “Hola jefe”.
1. Asegura la demanda
Tienes una idea novedosa, piensas que la vas a romper. ¿Sabes si hay personas dispuestas a adquirir tu producto o servicio? Es esencial asegurar que tu idea tiene mercado. Por eso, revisa reseñas, comentarios, investiga en qué países es tendencia, qué tipo de contenido ayuda a posicionarlo. Con todos esos datos, tendrás identificada dónde está la oportunidad.
2. ¿Quién es tu cliente?
A la hora de definir tu producto debes saber cuáles son las necesidades de los clientes (sus gustos, sus valores, hábitos…) Hazte preguntas sobre esos ámbitos para definir qué es lo que el cliente espera de tu marca.
3. Busca capital
Money is money. Para crear un negocio necesitas dinero y muchas veces los ahorros no son suficientes para enfrentar las primeras inversiones. Si quieres impulsar el negocio puedes buscar socios inversionistas, crowfounding o apoyo de fundaciones. Por ejemplo, Sercotec tiene 3 programas de ayuda financiera para pymes que están recién comenzando y Fosis ofrece apoyo económico a emprendedores con sus programas “Yo Emprendo”.
Una vez iniciada la operación, te recomendamos el anticipo de facturas porque para obtener liquidez no necesitas reportar ventas mínimas ni antigüedad.
4. Para emprender no hay edad
Para emprender la edad no importa. Nunca es pronto ni tarde… Lo importante es que estés al día en el uso de herramientas como marketing digital, B2B o B2C, entre otros.
5. Autodisciplina, siempre
Tener una empresa requiere disciplina. Es importante respetar horarios, fijar fechas límite, llevar control de las finanzas y realizar tareas de marketing.
6. Emprender es un reto
¿Pensaste que todo era de color de rosa? Siempre pueden surgir situaciones inesperadas. La pandemia del Covid-19 es el ejemplo perfecto de ello. Quienes tienen un negocio han tenido que hacer grandes ajustes para sortear este momento. No lo olvides: emprender requiere todo tu compromiso y flexibilidad para enfrentar lo inesperado.
