Existe una serie de ayudas estatales para apoyar a las pymes que siguen vigentes, y de no ser suficientes el factoring aparece como una alternativa para obtener capital de trabajo y evitar deuda bancaria.
La pandemia de Covid-19 ha generado en Chile, al igual que en el resto del mundo, una de las crisis económicas más abruptas –aunque también más breves- de la historia, puesto que hoy el país ya ha recuperado su nivel de actividad previo a la emergencia
Según la última Encuesta de Expectativas Económicas (EEE) de septiembre del Banco Central, la expansión del Producto Interno Bruto (PIB) para 2021 será de 10,4%. Sin embargo, para 2022 las proyecciones del ente rector anticipan un crecimiento de apenas 2,5% fruto de una fuerte moderación en el consumo de los hogares.
Y en todo este escenario las empresas de menor tamaño podrían sentir también el impacto de esta baja de crecimiento.
¿Por qué? Porque hasta hoy día, y después de una primera etapa donde sufrieron un fuerte impacto, las pymes han tenido una recuperación de sus ventas más pronunciada que otras empresas gracias a las políticas de apoyo al crédito.
Así, la extensión de las ayudas por parte del Estado se hace esencial para continuar con la recuperación de las pymes, que recordemos representan más del 99% de las empresas en Chile y aportan más del 65% de los empleos formales.
De todos modos, y teniendo consciente este panorama, varias de las ayudas impulsadas por el Estado en medio de la pandemia siguen vigentes en la actualidad y pueden serte de ayuda para los tiempos que vienen. Aquí te dejamos las principales:
1. Crédito Fogape. Considera préstamos con garantía estatal para pequeñas y medianas empresas. Estará vigente durante este año, hasta el 31 de diciembre.
2. Bonos a Pymes. Continúan vigentes para pago de cotizaciones y el bono adicional variable, disponibles en la página del SII hasta el 18 de octubre de 2021.
3. Beneficios para micro, pequeñas y medianas empresas. Esto supone la disminución transitoria de la tasa de interés penal para pymes, extensión de vigencia de patentes provisorias y flexibilidad en convenios de pago con Tesorería. Vigente hasta el 31 de diciembre de este año.
En el caso que esas ayudas no sean suficientes, siempre existe la posibilidad de realizar factoring con Fivana y convertir las facturas en capital de trabajo sin la necesidad de recurrir a créditos bancarios.
Si quieres conocer más en detalle las ayudas, requisitos y solicitarlas, el Servicio de Impuestos Internos (SII) tiene toda la información a tu disposición. Te animamos a que lo revises lo antes posible. Serán de gran ayuda cuando más lo necesites.