El factoring online reduce la asimetría de pagos, permite ordenar el flujo de caja y hasta genera ahorros.
En la era de las fakenews, opinólogos y fastcheck, la solución es corroborar la información antes de replicarla, y así dejar de contribuir con la creación de mitos que manipulan las decisiones de las personas y de las empresas.
Con el tiempo se ha desarrollado una mitología negativa en torno a vehículos financieros de deuda como el factoring online. Lo contradictorio es que pese a esta fauna de versiones erradas y de malas interpretaciones, la industria de Factoring no Bancario (FNB) ha crecido con fuerza en los últimos años.
Julián Quiroga, CEO de Fivana, empresa que ocupa posiciones de liderazgo en en factoring online chileno, detalla que “cada vez más empresas de todos los tamaños en Chile optan por Factoring Online para agilizar el pago de sus facturas por cobrar, a la velocidad que la empresa requiere”.
Los mitos más comunes sobre el factoring online en Chile son los siguientes:
El factoring online es muy caro: La respuesta es NO, y la razón es simple. Debido a la gran cantidad de empresas que ofrecen factoring online en Chile, existe un alto nivel de competencia que permite entregar servicios financieros a costos muy competitivos.
Además hay que tener en cuenta que, en una operación de factoring, la empresa que entrega el financiamiento analizará varios factores de riesgo, tanto de la empresa que solicita el factoring como del deudor final. Eso determinará la tasa con que se entregue el dinero. Es decir, cada operación de factoring online es como un traje a la medida que se construye bajo parámetros específicos de cada cliente y deudor, explicó Julián Quiroga de fivana.
Es inseguro: El factoring online opera en sistemas seguros, potentes y escalables como los de Amazon Web Services, donde además la información está encriptada. “Los datos son privados. Solo el cliente tiene acceso. La plataforma usa los datos con la única finalidad de evaluar el financiamiento más adecuado para la empresa que lo solicita, mediante un riguroso proceso de encriptación”, asegura el ejecutivo de Fivana.
El factoring es solo para las pymes: Esto, mas que mito es una fake new. La prestigiosa clasificadora de riesgo Feller Rate, en junio de 2021 emitió un reporte donde muestra que la cantidad de facturas cedidas electrónicamente para operaciones de factoring no bancario creció exponencialmente entre 2013 y 2019, desde 1.5 millones de facturas a casi 5 millones.
Si bien, la mayoría de las empresas que solicitan servicios de factoring son pymes, en la actualidad es un servicio que se solicita de manera transversal, con una participación cada vez mayor de medianas y grandes empresas a través del financiamiento por cesión de facturas.
Afecta la reputación de la empresa: Adelantar el pago de las facturas, acelerando el cobro de 30 o 60 días a pocas horas, no es sinónimo de desorden en la caja o que la empresa tenga problemas. Por el contrario, reduce la asimetría de pagos, permite ordenar de mejor manera el flujo de caja y hasta genera ahorros, en tiempo y equipo sobre todo en el área de cobranza, pudiendo transformar a esos colaboradores, o gran parte de sus horas hombre a otras tareas relevantes para la empresa.
La única forma de terminar con los mitos es con información, o a través de la experiencia. En el caso del factoring online, solo se requiere tiempo para cotizar y encontrar el servicio que mas se adecue a las necesidades y la velocidad de financiamiento de la empresa.